jueves, 5 de febrero de 2009

Verdades y mitos sobre Carga Rápida



El uso de esta tecnología elimina la necesidad de tener centros de cargas carísimos y con concentración de gases (hidrógeno). Se colocan cargadores dedicados en el área de trabajo donde opera el montacargas y no recorre largas distancias hasta el centro de carga.


Una de las razones por la que un famoso productor de automóviles se inclinó por esta tecnología fue la seguridad ya que con cargadores dedicados el montacargas sale muy poco de su área de trabajo evitando el contacto con peatones y el riesgo que existe al cambiar las baterías convencionales. Las baterías de carga rápida no se remueven del equipo.

Otro punto es el entrenamiento de los operadores, por lo regular ellos nunca han tenido que recargar sus equipos pero una vez que conocen como funciona y trabajan con carga rápida no tienen problema ya que no tienen que esperar a que remuevan su batería descargada por una cargada en el centro de carga.


Factores de la carga rápida.

El éxito de la carga rápida depende del tamaño de la flota, hablando en términos de dineros $$$$. Para empezar, la carga rápida solo trabaja con baterías húmedas de plomo-ácido con voltajes que van de 24V a 96V. Pero si sus vehículos utilizan baterías selladas o libres de mantenimiento no es muy bueno ya que el calor acumulado y el calor transmitido a la betería sellada a la hora de cargar es un problema.

Otros factores a considerar son:
-Tipo de baterías.
-Número de equipos en su flota.
-Número de turnos que operan sus equipos y que tan frecuente se realizan los cambios de baterías.
-Carga de trabajo y que tantos movimientos hacen sus equipos, es decir la forma en que se descarga la batería (subir, bajar, estibar, etc.).
En general, la carga rápida no es una solución de economía para los lugares donde se tienen uno, dos o tres equipos o donde los equipos se utilizan muy poco.
Otro factor es la frecuencia de cambio de las baterías normales, por ejemplo: Si mi operador tiene que cambiar su batería una o más veces al día, entonces el usuario final se puede beneficiar de la carga rápida.

Ventajas y desventajas.

La carga de baterías convencional requiere de inversión en cargadores y equipo para manejo de baterías, Hay también gasto en personal para cambio batería, mantenimiento y colocación de agua a las mismas.
Con la carga rápida Usted tiene que invertir en aditamentos pero se deshace del cuarto de carga de batería, esto significa más espacio y se olvida de los grandes barcos en los centros de carga.
Los ahorros en mano de obra resultan debido a que las baterías no se cambian hasta que termina su vida útil, no se manejan objetos pesados ni componentes corrosivos (ácido sulfúrico o electrolito).
Solamente permanece una batería en cada vehículo durante varios turnos y el operador conecta la batería directamente al cargador durante los periodos de descanso, a la hora de la comida, durante el cambio de turno y cada vez que el vehículo no se está utilizando.

Las baterías cargadas de forma rápida no duran lo mismo que las baterías cargadas convencionalmente la diferencia:

Vida útil de batería cargada en forma convencional 5 años.
Vida útil de batería modificada para carga rápida 3 años.

Esto nos indica que podríamos estar comprando casi la misma cantidad de baterías en los 5 años pero la única ventaja es que el desembolso no es de un solo golpe.
Las baterías para carga rápida requieren de pocas modificaciones tales como un conector USB extra, cables, interconectores de celdas dobles y módulos. Estos módulos censan y miden las condiciones de las baterías tales como voltaje, temperatura y también proveen históricos de la unidad.

Estas baterías también tienen que ser ecualizadas una vez por semana.

Los cargadores rápidos son MUY caros en comparación de los cargadores convencionales.

La mayoría de las baterías acondicionadas para carga rápida son nuevas, sin embargo se pueden acondicionar baterías de hasta 2 años de uso.